buscar colegio niño con autismo

Elegir colegio para un niño con autismo no es un proceso sencillo. La escuela es la institución que más huella va a dejar en la educación y en el futuro de nuestros hijos. Por ello, es normal que tengas dudas a la hora de afrontar esta decisión: poca oferta, diagnósticos inesperados, centros que simplemente no cumplen nuestras expectativas… Hoy os invitamos a conocer algunos tips para que este proceso resulte más fácil.

Los alumnos con autismo, el trastorno infantil con mayor prevalencia en la actualidad según un reciente estudio, se definen formalmente como “alumnos con necesidades educativas especiales” (ANEE). Hablamos de necesidades adaptadas en el campo de la comunicación, el juego, la comprensión o la inclusión segura.

Es necesaria la concienciación de esta realidad ya que, a día de hoy, uno de cada 100 niños nace con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y, a pesar de los datos, los estudios desconocen con total certitud las causas que explican su aparición.

Este trastorno afecta a la psicología y conducta de numerosos estudiantes de nuestro país. No obstante, al no manifestarse a veces tan evidentemente como en otros casos de personas que requieren atención especial física, como lo sería una persona que padece alguna discapacidad motriz, algunas instituciones escolares no se implican del mismo modo.

“Al igual que una persona en silla de ruedas necesita rampas, las personas con autismo necesitan profesionales preparados para su educación”. Denuncia una madre en esta crónica que pone en materia de debate si la inclusión escolar es algo realmente cierto.

Paralelamente encontramos el testimonio de Isabel, que define su situación como “una pesadilla”:

“Creo importante comentar que Iván aún no habla ni escribe, pero aún así llevan ya 4 años denegándonos la beca de logopedia del MEC (será que entienden que un niño que no habla no necesita apoyos extra…).”

¿Qué significa TEA, exactamente?

Los trastornos del espectro autista (TEA) se inician en la infancia, son de tipo crónico y afectan al neurodesarrollo de las personas. Encontramos en ellos un patrón de conducta condicionado por una evidente dificultad en la interacción social y sus protocolos, así como alteraciones sensoriales. Ello se traduce en problemáticas comunicacionales y las consecuencias que este fenómeno acarrea en la adquisición de conocimientos y las relaciones interpersonales.

De hecho, el manual diagnóstico DSM 5 informa de que existen diversos grados de autismo: una primera afectación que requiere una ayuda moderada del profesorado, un segundo grado que pasa a una demanda de ayuda notable y un tercer grado en el que esta necesidad de ayuda es imperativa. Asimismo, los TEA suelen unirse a otras patologías que necesitan atención en el aula.

¿Cómo abordar esta realidad?

Una detección precoz de TEA ayuda en la mejora del pronóstico del paciente. Si se estructura un programa de tratamiento a tiempo, así como si se acondiciona el contexto del alumno a sus necesidades, sus síntomas se verán mejorados dentro de esta nueva normalidad. Hecho que no sucedería con aquel alumno que, aun padeciéndolo, se sienta desamparado o “fuera de lo común” respecto a sus compañeros. En el caso de que se detecte a tiempo, se podrá trabajar óptimamente en el desarrollo de las habilidades cognitivas del alumno y en su adaptación al entorno.

Entonces, ¿qué pasos debo seguir para escolarizar a un alumno con TEA?

Tal y como lo dictamina la LOMLOE en su artículo 6, “las competencias en materia de educación, están cedidas a las comunidades autónomas”.

En el caso de Catalunya, por ejemplo, con el tiempo se ha demostrado que incluyendo a un educador especializado en colegios ordinarios, era posible la integración de una persona con autismo. Evidentemente, se deberían estudiar los casos individualmente, por el hecho que hemos mencionado anteriormente de que existen distintos casos de gravedad. Asimismo, tal y como indica esta crónica que narra una entrevista al presidente de la fundación Obrir-se al món y padre de David, un joven de 24 años con TEA, lo ideal sería una metodología mixta. Para obtener el trato profesional de una institución especializada, así como que para que el niño pueda socializar con personas sin dicho trastorno, personas que se encontrará también en su día a día. 

“No se trata de que estén durante todas las asignaturas con el resto de los niños, pueden tener sesiones a parte, con el logopeda, por ejemplo. Lo ideal sería una fórmula mixta”

De este modo, la realidad es que a la hora de buscar la escuela que mejor servicio pueda ofrecer a un hijo con TEA, no existe una fórmula universal. Dado que cada caso es diferente y se debe tratar con el cuidado que merece. Habrán niños que necesiten un servicio mixto así como otros que únicamente se puedan adaptar a escuelas con atención individualizada

Consultar primeramente con el psicólogo que conozca mejor el caso de tu hijo o hija es la mejor decisión y, posteriormente, desde buscarcole.com te podemos echar una mano ofreciéndote un listado con aquellos colegios que ponen a tu disposición servicios psicopedagógicos y atención especial, acorde a las recomendaciones del especialista.

 

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