Adaptar la educación de hoy a los retos reptes y desafíos de las generaciones del mañana. Esta es la gran preocupación, y también el objeto de estudio, de este educador y escritor británico. Todo empezó con una pregunta: ¿como tendría que ser el aprendizaje del siglo XXI? Para investigar sobre el tema, dejó la docencia y decidió colgar-se una mochila a la espalda para recorrer el mundo estudiando los métodos educativos más innovadores. De todo lo que ha aprendido en sus viajes, destaca que "nos deberíamos tomar más seriamente la creatividad" y que "nos encontramos frente al umbral de una revolución de la enseñanza".

Los proyectos educativos, la innovación pedagógica, el modelo educativo de los colegios son opciones esenciales.

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