La disciplina y el pensamiento crítico son pilares en la educación ya que permiten cuestionar, reflexionar y llegar a conclusiones fundamentadas en la razón y la verdad.
En la metodología de trabajo habitual en las escuelas, el personal docente es el que imparte conocimientos y el alumnado el que escucha. Pero hay otra manera de hacer las cosas.
Unas jornadas de orientación profesional pueden ser la ayuda clave para solventar todas esas preguntas que los alumnos tienen por solucionar antes de una elección que puede condicionar su futuro.
La periodista Carina Farreras reflexiona, en un artículo en La Vanguardia, sobre la comprensión lectora de los estudiantes españoles a partir de los datos de PISA y TIMSS, dos estudios internacionales de evaluación.